Durante esta época romántica del año al iniciarse la semana de San Valentín, es común ver en las redes sociales algunas cosas sobre “entrenamientos en pareja” y “por qué las parejas deberían entrenarse juntas”, sin embargo, entremos en el mundo real por un minuto…
Rara vez ambos miembros tienen niveles de aptitud física idénticos, lo que puede generar sentimientos de frustración, insignificancia o fracaso; también puede sentar las bases para una visión poco saludable del ejercicio y potencialmente dañar la relación. No obstante, esto no significa que las parejas no puedan hacer ejercicio juntas; bueno, aquí examinamos algunos beneficios de los entrenamientos en pareja que se dará mucho esta Semana de San Valentín.
¿Por qué entrenar juntos ?
En lo alto de la lista, el apoyo social que se brindan mutuamente al emprender juntos su viaje físico es algo fuera de serie. Varios estudios han demostrado que los entrenamientos en pareja pueden aumentar los niveles de felicidad y atracción en una relación y ayudar a ambos a alcanzar sus objetivos de acondicionamiento físico más rápido.
Los expertos creen que el ejercicio puede ser una excelente manera para que las parejas ocupadas se vuelvan a conectar, brindándose al ánimo y apoyo cuando más se necesita, ser testigo del éxito del otro, generar confianza durante esos momentos vulnerables y sufrir juntos y luego reírse de ello son solo algunas de las maneras en que puede funcionar… todo esto fortalece de sobremanera una relación amorosa.
¿ Cuando los entrenamientos en pareja pueden ser no saludables ?
A pesar de la investigación y los innumerables artículos sobre los entrenamientos en pareja, no siempre son la luz de la luna y las rosas que están hechas para ser así; es común que surjan sentimientos de tensión cuando una pareja tiene un nivel de condición física más alto que la otra, creándose más estrés si uno de ellos intenta controlar la sesión de entrenamiento, asignando los ejercicios y criticando potencialmente la forma y la capacidad del otro.
Más que otras actividades, trabajar juntos puede traer temas desafiantes como confianza, vulnerabilidad y dinámicas de poder. Y, si bien algunas parejas pueden dar la bienvenida a un poco de competición amistosa, puede causar demasiado estrés en los demás.
Entrenamientos en pareja – seguros y divertidos
Antes que nada es mejor contratar un entrenador: este primer paso esencial no es solo para parejas, sino también para cualquiera que esté listo para incursionar en un programa de acondicionamiento físico. Hacer que un entrenador personal certificado te lleve a ti y a tu pareja a través de varias opciones de ejercicios y asignar un programa en esta semana puede ayudar a eliminar el aspecto de “control” de ir al gimnasio, sobre todo en San Valentín.
- Clases de ciclismo: el ciclismo de indoor proporciona un excelente ejercicio cardiovascular al que se puede acceder en todos los niveles de forma física. Tú y tu pareja controlan la tensión en tus propias bicicletas, lo que te permite sudar de lado a lado, incluso si estás en diferentes extremos del espectro de ejercicios.
- Ejercicios acuáticos: no solo son para mujeres mayores que usan gorras de natación; las clases de ejercicios acuáticos son atractivas para todos los niveles, desde atletas profesionales hasta adultos mayoresm, porque el agua se puede utilizar para descargar el peso corporal y reducir el impacto en las articulaciones, además es divertido.
- Entrenamiento en circuito: muchas parejas disfrutan de montar circuitos juntos; tanto tu como tu pareja seleccionan algunos ejercicios y la cantidad de peso o resistencia con los que se sienten cómodos, pudiendo moverse a través del circuito juntos o en diferentes estaciones, proporcionándose motivación mutua pero no necesariamente una comparación extrema.
- Entrenamiento TRX: un beneficio importante de las clases de entrenamiento de suspensión TRX y entrenamiento TRX es la capacidad de todos los niveles de aptitud para ajustar rápidamente la intensidad de los ejercicios simplemente moviendo los pies. Al igual que el ciclismo y el ejercicio acuático, la facilidad de adaptación no dejará a un miembro del equipo sintiéndose menos que el otro.
- Deportes mixtos: en lugar de arriesgarte a competir cara a cara, únanse a un equipo amistoso de deportes mixtos y manténganse en forma juntos. Solo recuerda que si el objetivo es perder peso, asegúrate de que no haya consumo de alcohol o excesos con los demás integrantes de cualquier tipo de equipo deportivo.
- Boxeo: Ahora es fácil encontrar un lugar para golpear una bolsa pesada en forma segura; una vez más, cada uno determina el nivel de intensidad para esta fantástica actividad, lo que mejora la capacidad cardiovascular, la fuerza total del cuerpo y la coordinación manos-ojo. Y si hay una tensión en la relación, este es un gran lugar para aliviar ese estrés.
Misma hora, mismo lugar, diferentes actividades… muchas parejas encuestadas disfrutan tomándose el tiempo en el gimnasio juntas, pero prefieren hacer sus propios entrenamientos. Todavía se motivan mutuamente para mantenerse activos y en forma, y ambos se benefician de la mejora de los niveles de condición física y la carrera de endorfinas. Incluso así; realizar entrenamientos en pareja separados ayuda a eliminar cualquier conflicto potencial que pueda surgir.
La comunicación constructiva y abierta es la clave número uno para el éxito, porque establece el tono para el respeto y la cooperación; esto ayuda iniciar la conversación reconociendo que el ejercicio, y el gimnasio en particular, es una situación que significa diferentes cosas y anhelos. Bueno, con tantas opciones para elegir, realmente no hay razón para evitar hacer ejercicio con tu pareja, solo asegúrate de concentrarse menos en la competición y el control y en ser su mayor fuente de apoyo.