Los científicos han descubierto un nuevo ingrediente que podría ser el secreto para ayudar a sentirnos satisfechos más rápido; teniendo en cuenta el hecho de que alrededor de un tercio de las personas están en sobrepeso, la ciencia experimenta cada día nuevas formas sumando innovación y tecnología para tratar la obesidad. Trabajar sobre la saciedad es la clave para llevar a cabo nuevos estudios, y esta vez crearon a final del año pasado lo que denominaron IPE (inulina-propionato de etilo) que estimula los intestinos, liberando las hormonas que reducen el apetito en el cerebro.
Cuando los microbios presentes en el colon fermentan la fibra de los alimentos que se consume, se producen ácidos grasos de cadena corta; varios estudios recientes han encontrado que éstos, que llevan el nombre de propionato puede ayudar a regular el apetito mediante el impulso de la secreción de ciertas hormonas intestinales, específicamente el péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) y el péptido (PYY).
Aunque estas hormonas se liberan después de que el cuerpo fermenta la fibra dietética, una dieta normal no proporciona una gran cantidad de propionato; en esta ocasión los investigadores pensaron que si entregasen una forma concentrada de propionato directamente al intestino, sería un ingrediente para tener una sensación de saciedad más rápido, lo que disminuiría la ingesta de alimentos y en última instancia, prevenir el aumento de peso, y así crearon el IPE en un modelo celular de colon humano.
Que dicen los estudios sobre el IPE
Científicos del Imperial College de Londres, que forman parte del Grupo de Investigación de Nutrición y Dietética, realizaron dos estudios para probar el nuevo IPE; en primer lugar, los investigadores reclutaron a 20 participantes y dieron a la mitad de ellos 10 gramos de fibra dietética regular y la otra mitad 10 gramos de IPE, pero ambos gripos podían consumir la cantidad de comida que querían de un buffet.
Los resultados fueron bastante notables, porque los participantes del estudio que recibieron el IPE consumieron 14% menos alimentos que los participantes que recibieron la fibra dietética, además los mismos tenían menores cantidades de hormonas del apetito circulando en su torrente sanguíneo.
Los investigadores querían estudiar más a fondo, entonces hicieron un exámen sobre los efectos del IPE a largo plazo trabajando 24 semanas, en un estudio aleatorio controlado, pero incluyendo a 60 personas con sobreso; a la mitad se les dio una bebida con 10 gramos de IPE, mientras el otro grupo tomó la misma bebida diariamente con 10 gramos de fibra dietética, demostrándose que los que tomaron el IPE disminuyerno sus hormonas de apetit PYY y la GLP-1, lo que les hizo consumir menos calorías y por supuesto perdieron más peso corporal que el otro grupo, disminuyendo la grasa del hígado y del vientre, conservando además la sensibilidad a la insulina, y sin efectos secundarios.
Estos científicos planean realizar pruebas para ver si pueden añadir IPE a los alimentos consumidos comúnmente y obtener los mismos resultados en los suplementos supresores del apetito; esto podría tener un impacto importante en la lucha contra el sobrepeso, pues el ingrediente podría inhibir el apetito con mayor fuerza en los adultos, y aunque “no haya una píldora mágica”, sería un compuesto efectivo y disponible para todos.
Fuente
- Kari Hartel, RD, LD Fitday Research: Could this ingrediente be the key to feeling full faster