En diferentes ocasiones hemos mencionado lo perjudicial que puede llegar a ser un consumo excesivo de azúcar, y también hemos recalcado muchas veces que el problema es que la población general no sabe que está consumiendo tanto azúcar.
Es decir, muchas personas incluso a día de hoy siguen pensando que los yogures son buenas opciones, que son alimentos saludables, cuando la realidad es que la mayoría de yogures contienen una cantidad elevada de azúcar.
Si nos diésemos un paseo por el supermercado, y le preguntásemos a 10 personas sobre el contenido de azúcar de un paquete de galletas oreo y un yogur Activia, probablemente la mayoría respondería que el yogur Activia tiene menos azúcar, y que por lo tanto es una opción más saludable.
La realidad, es bastante diferente:
Como podemos observar en la imagen, el yogur tiene más azúcar que las galletas oreo, por lo que algo que a priori puede parecer un alimento saludable (nombre “guay”, color verde, frutas en el envase…) acaba no siendo realmente una buena opción, y aun así creo que es necesario aclarar que un alimento no es bueno o malo única y exclusivamente por su contenido en azúcar, eso sería ser reduccionista, pero sí es algo a tener en cuenta a la hora de escogerlo, sobre todo si se trata de un alimento de consumo frecuente.
En un estudio publicado recientemente (1) en el que se han analizado diferentes yogures se ha llegado a la conclusión de que la mayoría de yogures disponibles en el supermercado presentan una cantidad de azúcar mucho mayor a la recomendada, de hecho, algunos yogures llegan incluso a superar la cantidad de azúcar contenida en algunos refrescos.
Por lo tanto, la recomendación si buscamos mejorar nuestra salud (y también nuestra composición corporal) es tratar de evitar la mayoría de los yogures que se comercializan en el supermercado.
Pero… ¿No hay ninguna buena opción?
Si nos gusta el yogur como postre y queremos encontrar una buena opción es necesario que miremos con detenimiento la información nutricional del producto.
Tenemos que fijarnos en los ingredientes del yogur (que no lleve azúcar añadido) y en la cantidad de azúcar presente en el producto, por ejemplo, este yogur es una buena opción:
Como podemos observar la cantidad de azúcar es mucho menor si la comparamos con otros yogures del supermercado, por supuesto hay otros yogures que también son buenas opciones, como este:
Algo a tener en cuenta es que el yogur natural sin azucarar tiene un sabor ligeramente ácido, por lo que muchas veces la transición de un yogur azucarado a un yogur natural es difícil, en ese caso te recomiendo que le eches algo de fruta (como fresa, plátano, arándanos…) para darle un toque más dulce, y facilitarte más el proceso.