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Disfrutar de uno de los dulces más sabrosos de la península no debería ser un pecado cuando se sigue una dieta
Los buñuelos son parte de nuestra tradición en Semana Santa; si bien son calóricos dependiendo de cómo se preparen, reducir la mitad de sus calorías es una misión para los que entrenan seriamente y no desean subir de peso súbitamente. Así como la leche frita, los pestiños o las torrijas, pecar al disfrutarlos tiene su penitencia y en este caso puede pagarse con el sabor o incluso con la moderación… pero bueno, las alternativas de los ingredientes saludables y menos calóricos también ayudan.
En su preparación, se conserva los sabores del postre que tanto amamos… a ver si os gusta.
Ingredientes para nuestros buñuelos fitness
- 3 vasos de leche descremada/desnatada
- 150 g de alguna harina fitness de tu preferencia
- 1 huevo
- 2 cucharadas de maicena
- 5 g de edulcorante líquido y sacarina
- 2 cucharadas de levadura en polvo
- 2 manzanas
- ½ vainilla
Preparando la masa para los buñuelos
- Mezcla la harina con la levadura, añádele el edulcorante para conseguir una masa que debe ser homogénea
- Añade el huevo mientras bates logrando la pasta suave; al estar lista añade la leche y mezcla para que quede integrada como se debe.
- Deja reposar la masa en aproximadamente 15 minutos.
Preparando los buñuelos de manzana
- Pela las manzanas, quitándolas el corazón; córtalas en dados medianos.
- Inserta los dados a la masa y mezcla hasta que se queden integrados a la misma.
- Haz de la mezcla formas redondeadas y colócalas en una bandeja sobre papel de hornear para que no se peguen.
- Precalienta el horno a 180º y hornea las porciones hasta que queden ligeramente tostadas
- Retira del fuego y rocía los buñuelos con azúcar glas y canela molida.
Preparando el relleno de vainilla
- Pon en el fuego un cazo con la vainilla cortada y la leche; debes hacer que salgan los granos mientras cocinas… la leche estará así impregnada con el sabor a vainilla.
- Mantiene la mezcla durante 30 minutos a fuego lento, haciendo que la leche llegue al punto de ebullición tres veces… deberías ir retirando la nata, colando la leche en otra olla y seguir a fuego lento.
- Añade la maicena en un vaso con un poco de agua y añade 3-4 gotas de sacarina… echarla a la mezcla de leche, removiendo hasta que empiece a espesar, para luego retirar del fuego.
- Deja enfriar durante algunos minutos.
Para servirlos, pon la crema de vainilla en la base de una bandeja y encima van los buñuelos que pueden ser decorados con algunas ramitas de canela o vainilla. Añadimos que todo es cuestión de gustos, porque los buñuelos van de acuerdo a la cultura de cara región, pudiendo ser dulces rellenos con otras frutas como el plátano o con vegetales como espinacas o alcachofas y, por supuesto con pescados como el bacalao.