Perdiendo grasa con semillas de chía: la chía tiene una tradición maya mucho más que milenaria, pues se relacionaba con la “fuerza” esencial, pero fue usada también por los aztecas para proteger sus organismos y ofrecer al cuerpo energía y vitalidad. Hoy en día la nutrición deportiva ha abierto las puertas a esta poderosa semilla, ya sea como extracto aislado o como ingrediente en algunos de los mejores suplementos energéticos del mundo.
Perder grasa, sobre todo en enero no es un objetivo fácil pues para muchos estamos aún en un período de volumen, pero un equipo de investigadores canadienses desarrollaron un espectacular estudio publicado el año pasado en la revista Nutrition, Metabolism and Cardiovascular Diseases, donde indican como las semillas de chía (Salvia hispánica) actúan sobre el metabolismo de las grasas.
La grasa corporal vs las semillas de chía
Los científicos reclutaron a 31 adultos con sobrepeso y les hicieron seguir una dieta modesta de restricción de calorías (500 calorías menos de lo que se necesitaba para el mantenimiento) durante seis meses, dividiendo a los participantes en dos grupos:
- El primer grupo comió 36 gramos de fibra de avena (alrededor de 2 cucharadas soperas) por cada 1.000 calorías de comida ingerida.
- El segundo grupo comió 30 gramos de semillas de chía (también alrededor de 2 cucharadas soperas) por cada 1.000 calorías de comida ingerida.
Luego, los científicos rastrearon los cambios en el peso corporal, el tamaño de la cintura, la composición corporal, el control glucémico, la proteína C reactiva (un indicador de inflamación sistémica) y las hormonas relacionadas con la obesidad, tomando en cuenta que todos siguieron la misma rutina y tenían un físico parecido antes de empezar el estudio.
Lo que encontraron fue que el grupo que consumió las semillas de chia perdió alrededor de 2 kg de grasa corporal y disminuyó el tamaño de la cintura aproximadamente 4 cms, mientras que el grupo que consumió la fibra de la avena tuvo cambios, pero poco significativos. Por otro lado, los consumidores de semillas de chía también experimentaron una tendencia descendente en la proteína C-reactiva (algo bueno porque significa que la inflamación sistémica disminuyó), junto con una mayor producción de adipokinectina (una hormona que regula la degradación de los ácidos grasos); en este caso, el grupo que consumió la fibra de la avena no fue tan afortunado y se mantuvo más o menos igual.
Por extraño que parezca, mientras que la intervención con semillas de chía causaron que los hombres pierdan grasa corporal, aparentemente la pérdida de grasa corporal no tuvo nada que ver con un mejor equilibrio de insulina, lo que probablemente hizo que los científicos se acariciaran la barbilla con tanta fuerza, ya que no podían creer lo que pasaba.
El por qué exactamente los participantes perdieron peso seguía siendo un misterio para los investigadores, pero supusieron que la composición rica en nutrientes de las semillas de chía, incluyendo sus fibras, ALA (ácido alfa linolénico), proteínas, minerales y antioxidantes, puede actuar individual o colectivamente para demostrar beneficios en la pérdida de grasa corporal, proveer energía e hidratación inclusive.
Fuente
- Nutrition, Metabolism and Cardiovascular Diseases – 2017: Salba-chia (Salvia hispanica L.) in the treatment of overweight and obese patients with type 2 diabetes: A double-blind randomized controlled trial
Carmen
30 enero, 2018 a las 8:21 pmNo falta en mis desayunos mezcladas con semillas de lino y mis copos de avena ?