Después del entrenamiento, un batido de proteínas puede aumentar la tasa de síntesis de proteínas musculares, y de acuerdo a los tipos de nutrientes y aminoácidos, y su forma de transporte a las células musculares harán que se recuperen de una u otra manera; la recuperación es relevante para construir tamaño y fuera, pero la pregunta al tomarnos un batido de proteínas, es cual fuente funciona mejor, por ello, un grupo de científicos concluyó un estudio sobre las proteínas de leche vs la proteína de carne en el post-entreno, y cuyos resultados fueron publicados en The American Journal of Clinical Nutrition.
Ambos polvos actúan como una fuente rápida y conveniente de proteína, porque proporcionan alta calidad, con buen sabor y bajas calorías, y además de desempeñar un papel importante en el crecimiento, la reparación y el mantenimiento de los músculos, también protege los órganos y el metabolismo; en materia de rendimiento, ambas tienen propiedades casi similares, pero sus perfiles nutricionales son muy diferentes, siendo necesario un pequeño análisis sobre cada punto.
Comparando dos proteínas de calidad
Mientras que la proteína de suero de leche es naturalmente rica en nutrientes esenciales, la proteína de carne está muchas veces enriquecidas con vitaminas y minerales; la proteína del suero tiene la mayor cantidad de leucina (BCAA’s) que entre todos los polvos de proteína, lo que ayuda a estimular la síntesis de proteínas y la construcción muscular, mientras la proteína de carne contiene una buena cantidad de creatina, que ayuda a aumentar la energía muscular, y construir músculos más grandes y más fuertes.
Sólo por sus datos nutricionales no se pueden decidir cual es la mejor, sin embargo la diferencia puede estar en su sabor y el costo, que tampoco sirve para evaluar las diferencias científicamente; aún faltan más estudios para confirmar estrictamente estas comparaciones, aunque los que son alérgicos a la lactosa, pueden aprovechar la proteína de carne, como alternar con otras fuentes.
En este estudio, los investigadores trabajaron con una docena de hombres jóvenes sanos que entrenaron con pesas; inmediatamente después de la sesión de ejercicios, recibieron por un lado 30 gramos de proteínas de carne de vaca, y por otro lado, la misma dosis de proteína de suero de leche. Aunque la fenilalanina de los derivados de la carne apareció en circulación de la sangre más rápidamente, y su disponibilidad después de 5 minutos fue de 64% en comparación con el 57% de la leche, la proteína de suero de leche aumentó la síntesis de proteínas en un grado mayor que la carne, después de 2 horas de su consumo.
La leche hizo un mejor trabajo de echar a andar el proceso de recuperación inmediatamente después del ejercicio, pero hay que recordar que la recuperación de un entrenamiento intenso puede tardar hasta 48 horas en completarse, por ello todo es controversial, pero tiene su implicancia científica, pues el desafío del cuerpo está en la experimentación para lograr una mejor recuperación muscular y obtener mejores ganancias musculares en el menor tiempo.
Daniel Pérez becerra
11 octubre, 2020 a las 3:09 pmSiempre he consumido de leche, pero esta me produce muchos gases. Creo q comenzaré a probar con la de animal.