Lácteos ¿Tomar o no tomar? Esa es la cuestión: Los lácteos son los causantes de múltiples controversias en el ámbito de la nutrición humana, por lo que en este artículo ponemos a tu disposición toda la información disponible acerca de este grupo de alimentos.
Leche y derivados lácteos, ¿Buenos o malos para la salud?
Catalogar a un alimento de “bueno o malo” para la salud es un grave error, ya que generalmente estas afirmaciones carecen de la suficiente propiedad, en el caso de la leche y los derivados lácteos, no podemos hacer una afirmación tan categórica ya que la leche de vaca ha demostrado favorecer la evolución de las úlceras de estómago actuando como un alimento aliado si se presenta este trastorno patológico.
Cuando hablamos de cómo interaccionan los lácteos con nuestro estado de salud y bienestar sin estar presentes situaciones específicas, nos encontramos ante un principal problema: se han realizado estudios tanto a nivel nacional como internacional y los resultados obtenidos no son concluyentes ya que respaldan las dos corrientes existentes en la actualidad: la que defiende el consumo de lácteos y la que indica que a través de ellos la salud disminuye notoriamente.
En ausencia de un consenso científico no es posible dar una recomendación o respuesta adecuada, por lo que lo más importante es disponer de una información veraz y completa respecto a los lácteos, lo que nos facilitará tomar una decisión u otra.
Aspectos positivos de la composición nutricional de los lácteos
La composición nutricional de la leche y los derivados lácteos nos aporta dos aspectos muy positivos, de una parte nos ayuda a cubrir los requerimientos de calcio, un mineral imprescindible para la salud ósea, y de otra parte aporta proteínas de alto valor biológico, ya que contiene todos los aminoácidos esenciales, que además, son de fácil asimilación, veamos el valor proteico de algunos lácteos:
Leche de vaca: 3,5 %
250 ml. de leche de vaca desnatada: 7,7 gramos
Yogur entero: 7,8 gramos
Queso blanco desnatado (100 gramos): 13,3 gramos
Debido a aspectos como los que hemos expuesto, el ministerio de agricultura recomienda la ingesta de 2 o 3 vasos de leche al día (o su equivalente en lácteos), aunque la media española se sitúa en el consumo de 1 vaso diario.
¿Por qué no debemos tomar lácteos?
Numerosas personas toman lácteos para satisfacer sus necesidades de calcio, no obstante, este mineral puede ser obtenido a través de complementos nutricionales con calcio y vitamina D, pero también a través de alimentos de origen vegetal como los siguientes:
-Berzas
-Brócoli
-Coliflor
-Leche de soja
-Tofu
Algunos estudios realizados por el Centro de Salud Pública de la Universidad de Harvard han concluido que el consumo diario de lácteos aumenta el nivel de grasas saturadas y también el nivel de vitamina A, la cual en exceso puede debilitar el sistema óseo, pero además de estas conclusiones, son muchos los motivos que se defienden para evitar el consumo de lácteos, veamos algunos ejemplos:
-En niños menores de 18 meses el consumo de lácteos puede causar carencia de hierro, así como de ácidos grasos esenciales y vitamina E.
-Los lácteos estimulan negativamente el sistema inmune.
-El consumo de lácteos se asocia a diabetes, esclerosis múltiple, enfermedades coronarias, enfermedad de Chron, síndrome del intestino irritable y cataratas.
-Al consumir lácteos consumimos también parte de los antibióticos administrados a la vaca para evitar enfermedades en las ubres.
-Los lácteos se asocian con procesos de alergia y sensibilidad, pudiendo afectar al comportamiento, sueño y concentración.
-Por el alto contenido en hormonas que posee la leche de vaca, ésta es especialmente perjudicial para las mujeres.
-La leche es rica en dioxinas, sustancias tóxicas vinculadas a la aparición de cáncer.
-El consumo cotidiano de lácteos (2-3 porciones diarias) aumenta el riesgo de padecer cáncer de próstata en los hombres y cáncer de ovario en las mujeres.
¿Tomar o no tomar lácteos? Esta pregunta no se puede responder de forma genérica pero antes de tomar una decisión sí debemos reflexionar acerca de lo siguiente: la leche de vaca está destinada al ternero, pero bajo ningún concepto responde a nuestras necesidades.