La suplementación dietética con yerba mate alivia la obesidad inducida por la dieta y mejora los marcadores de trastornos metabólicos en ratones, según informa un nuevo estudio en la revista Journal of Medicinal Food. Este estudio no se realizó en Sudamérica, donde la planta es originaria, sino en la Universidad Nacional KyungPook (Daegu) y la Universidad Nacional Pukyong (Busan), República De Corea.
La yerba mate, originaria del Paraguay (de ahí su nombre Ilies Paraguayensis) y extendida a Argentina, Uruguay y el sur del Brasil desde hace centenas, es un árbol en flor cuyas hojas se consumen como un té o en forma de mate (infusión con bombilla). Se sabe que las hojas contienen numerosos fitonutrientes, incluidos los ácidos clorogénico y cafeico, la quercetina, la rutina, el kampferol y varias saponinas.
Lo que dice la ciencia sobre la yerba mate
Para desarrollar el estudio se reclutaron ratones que recibieron el suplemento botánico de yerba mate (400 mg/kg de peso corporal) mostrando un aumento de peso significativamente menor que los ratones del grupo de control durante un período de 16 semanas de consumo de una dieta alta en grasas (HFD), además los ratones suplementados con yerba mate mostraron un mayor gasto de energía y de la expresión de genes quemadores de grasa (termogénicos) en el tejido adiposo blanco.
La yerba mate también redujo los niveles de los parámetros de lípidos en la sangre (ácidos grasos libres, triglicéridos y colesterol total). Además, tuvo efectos positivos sobre los niveles plasmáticos de leptina, la resistencia a la insulina; ciertas enzimas hepáticas asociadas con la lesión hepática y la acumulación de grasa hepática en los ratones.
Los científicos sugieren que la yerba mate podría tener aplicaciones no solo en el control de la obesidad, sino también en la prevención de la diabetes tipo 2 (a través de una resistencia reducida a la insulina); y la enfermedad de hígado graso no alcohólico (NAFLD), debido a su efecto sobre la lipogénesis en el hígado (el proceso de acumulación de grasa).
Estos hallazgos respaldan informes previos sobre el efecto antiobesidad de la yerba mate y sugieren que puede representar un candidato natural útil para el control de la obesidad y la resistencia a la insulina relacionada con la obesidad, dislipidemia y esteatosis hepática, al nivel de otros termogénicos reconocidos por la industria de la suplementación.
La seguridad de la yerba mate
Una investigación previa en ratas y conejos no mostró efectos adversos de la suplementación de yerba mate durante 90 días a 2 g/kg, cinco veces la dosis en este estudio con ratones y si bien existe evidencia limitada para sugerir que la suplementación a corto plazo en humanos puede mejorar los marcadores del estrés oxidativo y la lipoproteína de baja densidad (LDL), las experiencias y anécdotas entre los paraguayos, argentinos y uruguayos es brutal en relación al impulso metabólico que consiguen al tomar maté o tereré (versión caliente y fría), los cuales se hacen con yerba mate.
En realidad se necesitan más estudios para determinar la seguridad y la tolerabilidad a largo plazo de la yerba mate, sugieren los investigadores, no obstante es uno de los suplementos que tiene futuro para competir dentro del sector de la nutrición deportiva.
Fuente
- Journal of Medicinal Food: Long-Term Dietary Supplementation with Yerba Mate Ameliorates Diet-Induced Obesity and Metabolic Disorders in Mice by Regulating Energy Expenditure and Lipid Metabolism