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Los atletas que entrenan duro y que consumen carbohidratos se hacen preguntas de su efectividad de acuerdo con la cantidad consumida.
Aún sigue la tendencia que el efecto de una dieta rica en carbohidratos solo se produce cuando se entrena en tiempos más prolongados, pero su uso en sesiones con pesas (entrenamientos anaeróbicos) serviría para mejorar el rendimiento deportivo definitivamente. Las investigaciones como la publicada en la revista xxx tuvo como objetivo en analizar los efectos de este tipo de dietas sobre la hipertrofia muscular cuando se entrenan solo con pesas.
La literatura cita que los carbohidratos pueden ser consumidos antes, durante y después de la práctica de ejercicios físicos; en el estudio se analizaron datos de otras cinco investigaciones sobre el tema que validaron el punto de que los carbohidratos ejercen una gran influencia sobre la hipertrofia muscular y en general uno de los principales factores que mide este proceso es la liberación de insulina y el aumento de la sensibilidad de las células musculares a la insulina.
La importancia de los carbohidratos
Los nutrientes carbohidratos, proteínas y los lípidos proporcionan la energía necesaria para preservar las funciones corporales durante el ejercicio o el reposo, además de su papel como combustible biológico, estos nutrientes, denominados macronutrientes, mantienen la integridad funcional y estructural del cuerpo.
Últimamente, los alimentos o productos a base de carbohidratos están siendo muy utilizados por atletas o practicantes de actividad física; los carbohidratos son nutrientes que desempeñan importantes funciones en el organismo incluida la preservación y conservación de las proteínas (evitando su fraccionamiento), funcionan como activador metabólico para el tratamiento catabolismo de los lípidos y como combustible para el sistema nervioso central, almacenándose en los músculos y en el el hígado, en forma de glucógeno.
Definiendo la hipertrofia
El término hipertrofia es conceptuado de una forma bien resumida como el aumento del área de la sección transversal del músculo que específicamente puede incentivarse mediante el entreno de fuerza donde se producen cambios estructurales por una serie de procesos que son consecuencia del estímulo de una o varias sesiones de este tipo de entrenamiento (sea con pesas u otros accesorios de resistencia).
El entrenamiento de fuerza realizado dentro de sus principios (volumen, intensidad, intervalo de recuperación entre las series, orden de los ejercicios, entre otros) puede ocasionar aumentos sustanciales en la fuerza y en la hipertrofia muscular. De acuerdo al tipo de entrenamiento se produce un aumento de las proteínas intracelulares como actina y miosina y, también de otras moléculas como la creatina, el glucógeno y el agua.
Los aumentos observados en el volumen muscular se derivan de los aumentos agudos y crónicos en el turn-over (catabolismo y anabolismo) proteico muscular, de forma que la síntesis exceda la degradación proteica, dándose así la hipertrofia muscular.
Los carbohidratos y la hipertrofia muscular
En algunos estudios hechos en los últimos años, los autores concluyeron que muchos practicantes de entrenamiento de fuerza hacen uso de una dieta rica en carbohidratos, porque además de mejorar el rendimiento durante los entrenamientos, los mismos ayudan en la hipertrofia muscular, tomando en cuenta que la secreción y concentración de insulina desempeñan papel clave en el proceso anabólico de post-entrenamiento.
El consumo de carbohidratos hace se libere insulina, que es una hormona que desempeña un papel importante en el aumento en la captación de glucosa por los músculos, lo que da un efecto anabólico a los mismos, ocasionando el aumento de masa muscular. Los ejercicios de fuerza (con uso de pesas u otros accesorios que producen resistencia) mejoran la sensibilidad a la insulina aumentando la masa muscular magra, debido a un gran aumento suministro de glucosa disponible en respuesta a una alta ingesta de carbohidratos.
En este tipo de sesión de ejercicios, el seguimiento de dietas ricas en carbohidratos pueden proporcionar un aumento en las reservas de glucógeno muscular, acentuando el proceso de hipertrofia muscular. Al contrario de lo que ocurren con atletas de resistencia, las dietas ricas en carbohidratos son poco comunes entre culturistas y atletas aficionados a los hierros y tal vez eso puede ser explicado por factores como la elección por dietas hiperproteicas o carencia de estudios relacionando con los entrenamientos de alta intensidad y su relación con los carbohidratos, pero ellos son fundamentales para los cambios hormonales que son beneficiosos para la reposición del glucógeno muscular y otros procesos anabólicos.
Cuando se consumen los carbohidratos después del ejercicio de fuerza, las concentraciones de glucosa y la insulina en la sangre aumentan. La insulina es una potente hormona anabólica que estimula la síntesis de glucógeno, grasas y proteínas, por tanto se potencia la respuesta a la síntesis proteica y la reposición de los stocks de glucógeno; ahora bien, el anabolismo se da por la estimulación de los músculos mediante este tipo de entrenamiento pero solo se produce en el período de recuperación donde deben existir carbohidratos y esto es determinante.
Fuente
- International Journal of Sport Nutrition: Nutritional considerations for ultraendurance performance