La D-ribosa apoya al rendimiento y la recuperación al empezar a entrenar: los niveles de trifosfato de adenosina (ATP) del músculo esquelético se reducen severamente durante y después de un entrenamiento prolongado de alta intensidad; la recuperación de estos niveles más bajos de ATP puede tomar días, lo que puede afectar el rendimiento en los días posteriores al entrenamiento y en este caso, la D-ribosa puede ayudar.
Los individuos no entrenados a menudo sufren el estrés y las consecuencias de episodios agudos y repetidos durante los entrenamientos, al no tener la capacidad de realizar o recuperarse lo suficiente como para ejercitarse en días posteriores. Por el contrario, las personas entrenadas pueden recuperarse más rápidamente debido a sus sistemas metabólicos mejorados; está asumido que la D-ribosa (DR) puede mejorar la recuperación de ATP, sin embargo, no se sabía si la recuperación y el rendimiento se pueden mejorar con la ingesta de D-ribosa (DR).
Este estudio publicado en el Journal of the International Society of Sport Nutrition durante este mes y encabezado por científicos americanos fue diseñado para determinar qué influencia podría tener la D-ribosa (DR) sobre el rendimiento muscular, la recuperación y el metabolismo durante y después de un régimen de entrenamiento de varios días.
El estudio que fue doble ciego, cruzado desarrollado con 26 individuos sanos, comparó 10 g/día de de D-ribosa (DR) con 10 g/día de dextrosa (DEX, control).
- Todos los individuos se suplementaron 2 días de carga con DR o DEX, seguidos por 3 días adicionales de suplementación y durante estos 3 días de suplementación, cada individuo se sometió a 60 minutos de entrenamiento de intervalo de alta intensidad en sesiones diarias separadas, que involucraron ciclismo (8 min de ejercicio al 60% y 2 minutos al 80% VO2max), seguido de una prueba de salida de potencia de 2 minutos (PO).
- Los individuos se dividieron en dos grupos en función de los resultados pico de VO2, VO2max inferior (LVO2) y VO2max superior (HVO2).
Los resultados mostraron que la potencia (PO) media y máxima aumentó significativamente desde el día 1 al día 3 para la prueba con la suplementación de D-ribosa (DR) en comparación con la dextrosa (DEX) en el grupo LVO2. La tasa de esfuerzo percibido (RPE) y la creatina quinasa (CK) fueron significativamente menores para la D-ribosa (DR) que para la dextrosa (DEX) en el grupo LVO2. Sin embargo, no se encontraron diferencias en la potencia, esfuerzo percibido, frecuencia cardíaca, creatina quinasa, nitrógeno ureico en sangre o glucosa entre los grupos suplementados para el grupo HVO2.
La conclusión científica es que la administración de suplementos de D-ribosa (DR) en el grupo de VO2max inferior dio como resultado un mantenimiento en el rendimiento en el entreno, así como niveles más bajos de esfuerzo percibido y creatina quinasa, a diferencia de los beneficios observados con la suplementación con dextrosa.
Está bien establecido que el entrenamiento físico conduce a muchas adaptaciones fisiológicas y bioquímicas y que el entrenamiento adecuado conduce a una mayor síntesis de glucógeno, mayor captación muscular de glucosa, atenuación en la resistencia a la insulina, estado de recuperación mejorado y una mejor capacidad de oxidación de grasas en individuos entrenados en comparación con los no entrenados que tienen un VO2 inferior, y que requieren recuperar sus niveles deprimidos de ATP después del estrés propio del entrenamiento.
Debido a los bajos niveles de ribosa en las dietas diarias habituales, la administración de suplementos de D-ribosa (DR) puede ser beneficiosa para producir los niveles necesarios de energía celular, es decir, ATP, durante y después del entrenamiento de alta intensidad. Basado en este trabajo específico, se demuestra que el rendimiento y las variables bioquímicas para los individuos menos entrenados mejorarán con la D-ribosa (DR) en comparación con la dextrosa (DX), pero no necesariamente para los individuos entrenados.
La D-ribosa juega un papel importante como un bloque de construcción para nucleótidos, coenzimas, nicotinato de adenina dinucleótido fosfato, ácidos nucleicos y ATP. Incluso con esta capacidad para mejorar la recuperación en los niveles de ATP, su papel en la ayuda al rendimiento muscular después de ejercicios de alta intensidad y resistencia ha revelado resultados mixtos. Hasta donde sabemos, este es el primer estudio que evalúa los efectos de la D-ribosa (DR) en sesiones de entrenamiento consecutivas de alta y baja intensidad.
Fuente
- Journal of the International Society of Sports Nutrition: The influence of D-ribose ingestion and fitness level on performance and recovery