Los hidrolizados de proteínas de diversas fuentes han sido reportados como eficaces para la nutrición humana debido a su composición de aminoácidos equilibrado y efecto positivo sobre la absorción gastrointestinal; en este caso, un grupo de científicos que forman parte del Laboratorio de Bioquímica y Nutrición Deportiva de la Universidad de Pavia en Italia investigó el efecto de este tipo de suplementos, obtenido del pez bacaladilla (Micromesistius poutassou), mediante el proceso de hidrólisis enzimática.
El estudio clínico aleatorizado se llevó a cabo con 120 personas con un ligero sobrepeso (25 kg / m2 ≤ IMC <30 kg / m2), en donde los hombres representaron el 25% y las mujeres 75%; para probar la eficiencia del suplemento dietético se utilizó dos dosis (1,4 g y 2,8 g) para observar si existía una relación dosis-efecto, además se lo asoció a una dieta hipocalórica liviana (-300 kcal / día). Para determinar los resultados se midieron los marcadores de composición corporal (masa magra, agua extracelular, circunferencia de la cintura, muslos y caderas), además de los niveles en sangre de la colecistoquinina (CCK) y el péptido similar al glucagón-1 (GLP-1).
Los investigadores subrayaron que las mediciones se hicieron al comienzo, y después de 45 y 90 días del uso del suplemento, y que los niveles de CCK y GLP-1 se involucraron con el control de ingesta de los alimentos, porque según la ciencia el tamaño de la comida está regulado por varias “señales de saciedad”, tales como la secreción de la CCK y el GLP-1, en respuesta a la ingesta de nutrientes específicos.
También, el GLP-1 periférico también puede interactuar con los reguladores conocidos de balance de energía a largo plazo, tales como la leptina, lo que implica que también se involucra con el balance energético. En este caso la alteración en el equilibrio energético conduciría al sobre peso debido a un balance negativo entre la ingesta y el gasto calórico, y desde este enfoque, se trató el uso de esta proteína del molusco, demostrándose que se puede modular las vías fisiológicas capaces de suprimir el apetito y reducir el consumo de energía, estimulando la secreción de CCK y GLP-1 como solución natural y lógica para lograr el objetivo.
Los resultados mostraron que no hubo diferencia entre las dosis, indicándose un efecto meseta a partir de los 1,4 g, pero se argumenta de forma concreta que el hidrolizado de pescado que ayuda a la composición corporal es efectivo para estimular tanto la CCK y el GLP-1, dejando abierta la investigación para que la industria de la nutrición deportiva lo tome en cuenta al diseñar productos naturales que favorezcan la pérdida de peso, sin efectos secundarios.
Fuente
- Food and Nutrition Reseach: Supplementation with a fish protein hydrolysate (Micromesistius poutassou): effects on body weight, body composition, and CCK/GLP-1 secretion