Destruimos los mitos del culturismo: El culturismo es un deporte plagado de mitos que debemos aclarar si queremos que se haga justicia a esta práctica deportiva y que sean menos las personas que se dejan llevar por informaciones erróneas.
El culturismo
Generalmente consideramos que el culturismo y el fitness son sinónimos, y si bien es cierto que guardan muchas similitudes también existen diferencias importantes, por ello inicialmente vamos a definir qué se entiende exactamente por culturismo.
El culturismo se define como la práctica sistemática y repetida de ejercicios físicos, de pesas y gimnásticos, con el objetivo de desarrollar los músculos del cuerpo.
Los mitos más extendidos del culturismo
Lamentablemente una actividad que sin lugar a dudas nos ayuda a mejorar la salud y bienestar está rodeada de mitos que se han extendido ampliamente y que hacen que muchas personas no se atrevan a iniciarse en esta práctica deportiva.
A continuación veremos cuáles son los mitos más extendidos del culturismo y mostraremos por qué son falsos:
- El culturismo no es una buena actividad para las mujeres: Sin lugar a dudas una de las mentiras más extendidas que se sustenta sobre la falsa afirmación de que las mujeres acaban transformando su cuerpo en un organismo puramente masculino. Esto no es real ya que las mujeres no tienen la misma concentración de testosterona que los hombres, por lo tanto, no van a responder igual ante el mismo estímulo.
- El culturismo causa impotencia y esterilidad: El ejercicio físico siempre ayuda a regular adecuadamente los niveles hormonales, pero bajo ningún concepto puede causar esterilidad, sino todo lo contrario. El culturismo causa un estímulo sobre las hormonas anabólicas, aumenta la concentración de testosterona y por lo tanto mejora la función sexual.
- La mejor forma de mejorar la composición corporal es el ejercicio aeróbico: No cabe duda de que el ejercicio aeróbico es altamente beneficioso para el organismo, pero no la mejor alternativa. Hay que combinarlo con ejercicios de pesas, ya que a mayor masa muscular, más serán las calorías que queme el organismo en reposo.
- Al dejar de entrenar el tejido muscular se convierte en tejido adiposo: Si dejamos de entrenar el músculo no tiene ningún mecanismo para transformarse en grasa, esto obedece más a un descuido nutricional y a un balance calórico positivo, pero no al hecho de haber entrenado con pesas.
- Ganar músculo y perder grasa a la vez es imposible: Es cierto que generalmente se recurre a una primera etapa de ganancia de volumen muscular y posteriormente a una segunda etapa de definición muscular. Esta suele ser la versión más aceptada y de hecho es correcto, pero no significa que sea imposible lograr ambos objetivos de forma paralela, aunque… ¿Cómo hacerlo? La clave está en la dieta, baja en carbohidratos y alta en proteínas, aunque reconocemos que puede ser más complejo.