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Cinco razones por las cuales sudar en pareja prolonga la relación: todos los días, las personas entrenan en los gimnasios, desenrollan colchonetas de yoga, golpean con sus zapatos deportivos el pavimento y se apuntan a nuevos desafíos de acondicionamiento físico; como estamos en San Valentín, es hora de que consideres cómo la forma física puede beneficiar no solo tu propia salud y bienestar, sino también tu relación amorosa.
¿Por qué no coges la mano de tu compañero/a e invitas a él o ella a que entrene contigo?; bueno, lo que pasa es que la ciencia mediante evidencias, sugiere que las parejas que sudan juntas realmente permanecen juntas. De hecho, trabajar juntos puede …
Entrenar en pareja aumenta la felicidad en la relación
Los estudios de laboratorio muestran que después de participar conjuntamente en un desafío o actividad física emocionante, las parejas dicen sentirse más satisfechas con sus relaciones y más en el amor con su pareja (Aron, Norman, Aron y Heyman, 2000). El ejercicio es un ejemplo perfecto del tipo de actividad vigorizante que puede tener estos efectos positivos; es la excitación fisiológica, más que la novedad o el desafío de la actividad, lo que impulsa la atracción romántica (Lewandowski y Aron, 2004).
Esto sugiere que compartir un objetivo de acondicionamiento físico (como entrenar para maratón u otra actividad deportiva), correr juntos regularmente, bailar en un salón o tener una cita nocturna en el gimnasio puede aumentar la calidad de la relación sentimental.
Entrenar en pareja mejora la eficiencia de los entrenos
Un concepto de larga data en la psicología social es que la mera presencia de otra persona afecta su capacidad para realizar una actividad (Zajonc, 1965). Incluso si ya te sientes competente haciendo un ejercicio en particular, entrenar en parejas puede ser una forma fantástica de aumentar tu producción de energía.
La presencia de tu pareja mejorará tu velocidad, sin que necesariamente estés consciente de su influencia (Bond y Titus, 1983). Por otro lado, si estás empezando a aprender a hacer burpees o a manejar una nueva máquina elíptica, mejor no lo hagas en presencia de tu pareja, porque puede interferir con tu capacidad para completar una tarea desafiante; tómate un tiempo para dominar tus ejercicios, luego lleva a tu pareja para un impulso en el rendimiento.
Entrenar en pareja puede enamorar a los dos
Entrenar en pareja induce los síntomas de la excitación fisiológica como manos sudorosas, pulso acelerado, dificultad para respirar. Estos síntomas reflejan, de muchas maneras, la emoción de la atracción romántica. Curiosamente, las personas pueden confundir fácilmente a los dos y atribuir erróneamente la excitación física a la atracción romántica (Dutton y Aron, 1974).
Lo que debes hacer es utilizar este fenómeno para tu beneficio invitando a tu pareja a entrenar juntos; ¿los resultados?… un posible aumento de tu atractivo a sus ojos.
Entrenar en pareja ayuda a alcanzar tus objetivos
Cuando los socios se preocupan por la forma física es más fácil lograr objetivos de acondicionamiento físico. Un estudio reciente de parejas heterosexuales mostró que los maridos de peso promedio que se preocupan por el estado físico participan en más actividad física cuando sus esposas ofrecen comentarios de apoyo relacionados con la salud (Skoyen, Blank, Corkery, & Butler, 2013).
Compartir subir las escaleras por la mañana, un duro paseo en bicicleta o una clase extenuante de zumba, puede proporcionar el contexto perfecto para tales comentarios. Sin embargo, no deberías confiar demasiado (o exclusivamente) en tu pareja cuando se trata de tus propios objetivos de condición física, pues enfocarte en ella y no en tus propios objetivos; la idea es consensuar y trabajar juntos.
Entrenar en pareja aumenta tu vínculo emocional
Al entrenar en pareja, creas un contexto en el que puedes coordinar tus acciones; por ejemplo, puedes levantar pesas al ritmo de tu pareja, hacer coincidir su propio caminar o correr con los tuyos, o tirar balones medicinales hacia adelante y hacia atrás. Tal comportamiento crea una coincidencia no verbal, o mimetismo, que los beneficia a ambos
El mimetismo no verbal ayuda a las personas a sentirse emocionalmente sintonizadas entre sí, y aquellos que experimentan o se involucran en él tienden a reportar mayores sentimientos de estar “unidos” a su pareja (Stel y Vonk, 2010). Hacer ejercicios juntos brinda la oportunidad de crear esa conexión, lo que beneficia tanto a tu salud como a tu relación.