La composición y función de la microbiota en el intestino humano cambia a lo largo del día, con vínculos a hábitos dietéticos y de baño; estos hallazgos hechos por científicos Universidad de Illinois en Urbana-Champaign se centran en los cambios en el 12% de la composición total de la comunidad bacteriana se asocian con el tiempo y esto tiene implicaciones directas para el diseño de futuros ensayos clínicos con probióticos.
Mientras que algunas investigaciones preclínicas han reportado una relación entre los ritmos circadianos y la composición y función de la microbiota intestinal, esto no ha sido reportado en humanos. El nuevo estudio, publicado en el American Journal of Clinical Nutrition, supuestamente es la primera vez que muestra tal conexión en humanos sanos.
Los autores del estudio escribieron: “las relaciones informadas entre la microbiota intestinal humana y la hora del día resaltan varios puntos importantes en el área en expansión de la investigación de microbiomas”; en primer lugar, las asociaciones entre el tiempo y la microbiota gastrointestinal humana son modestas en comparación con los estudios preclínicos, sin embargo, dado que estas relaciones pueden ser relevantes, el tiempo de defecación debe registrarse y considerarse como una covariable potencial en los análisis.
Aunque este estudio no examinó los resultados de salud, las conexiones entre la microbiota gastrointestinal y la salud del huésped están muy bien documentadas como para ignorarlas. En este escenario, la variación circadiana dentro del microbioma, y el potencial de comportamientos alimentarios para modificar esta variación, debe estudiarse más a fondo como una vía para las intervenciones de salud.
El tiempo y la microbiota funcionan sincrónicamente
Se reclutaron a 28 hombres y mujeres saludables para participar en el estudio; los voluntarios proporcionaron registros dietéticos y muestras fecales múltiples, que se analizaron con el fin de secuenciar la microbiota fecal. En esta instancia, se evaluaron varias variables, incluida;
- La hora del día,
- La frecuencia de comidas,
- El porcentaje de energía consumida a primera hora del día y,
- La duración del ayuno nocturno.
Los datos indicaron un vínculo entre el tiempo del reloj y los aumentos en las abundancias relativas de Bifidobacterium, Butyricimonas, Sutterella, Bilophila y un género no especificado dentro de la familia Rikenellaceae, mientras que se informaron disminuciones para Collinsella, Streptococcus y Eubacterium con la hora del reloj .
En general, la composición del 35% de las llamadas unidades taxonómicas operacionales bacterianas “OTU” se asociaron con el tiempo, equivalente al 12% de la composición total de la comunidad bacteriana, además, las concentraciones de los ácidos grasos de cadena corta acetato, propionato y butirato disminuyeron a lo largo del día.
El enfoque sobre los estudios sobre probióticos
Comentando independientemente sobre los hallazgos del estudio sobre el comportamiento de la microbiota durante el día, el Comité Científico de la Asociación Internacional de Probióticos (IPA) cita que se encontraron varias especies bacterianas que se correlacionan con los hábitos alimentarios y fecales. Centrándose en géneros que tienen uso de probióticos, los expertos del IPA observaron que las bifidobacterias parecen correlacionarse positivamente con la ingesta de energía temprana.
- Los Bifidobacterium y Escherichia se correlacionaron positivamente con el tiempo de defecación y el Streptococcus se correlacionó negativamente con el tiempo de defecación.
- No se encontró que el Lactococo se correlacionara con ninguno de los hábitos dietéticos y de defecación.
- No se observó que los “géneros probióticos” se correlacionaran con la duración del ayuno nocturno o la frecuencia de la comida.
Al preguntárseles si algo en el estudio podría beneficiar al campo probiótico, los expertos concluyeron que dado que estas son correlaciones y se desconoce la causalidad, puede ser prematuro sugerir el consumo de probióticos que contienen Bifidobacterium con un desayuno y/o almuerzo “pesado”. No obstante, el estudio sugiere que los hábitos alimenticios pueden influir en la supervivencia y la colonización de géneros probióticos, lo que plantea la cuestión de si esto podría influir en los efectos probióticos sobre la salud; por lo tanto, puede ser interesante tener en cuenta estas variables en futuras investigaciones con probióticos.
Fuente
- American Journal of Clinical Nutrition: Time of day and eating behaviors are associated with the composition and function of the human gastrointestinal microbiota