ÍNDICE
¡Buenas a todos! En este nuevo artículo, vamos a hablar sobre uno de los conceptos más de moda en el mundo del fitness, la autorregulación.
Introducción
La autorregulación, por mucho que se intente complicar, no es tan difícil de entender y llevarla a la practica como nos hacen creer.
Esta no es una forma de entrenamiento ni requiere complejos sistemas para su evaluación, sino que es un método de individualización (eso que cuesta tanto conseguir hoy en día con las rutinas corta y pega que encontramos en Internet). Este método, respecta nuestras características individuales y tiene en cuenta nuestro rendimiento diario, calidad y cantidad del sueño, dieta, estrés…
¿Autorregulación = entrenar por sensaciones?
Mucha gente relaciona realizar este método con entrenar como nos sintamos pero eso no es del todo así ya que entrenar según sensaciones es mucho más subjetivo y, muchas veces, provoca que entrenemos de forma extrema siendo más propensos a lesionarnos o seamos demasiado prudentes y realizamos menos de lo necesario. Obviamente, el uso de la autorregulación es algo subjetivo ya que resulta imposible realizarlo de forma objetivo cada día.
RPE o escala de esfuerzo percibido
Una de las formás más eficientes y sencillas de autorregulación es el famoso método RPE en el que se cuantifica el esfuerzo percibido en cada serie dependiendo de las repeticiones que dejemos en la recamara (RIR).
La tabla generalmente utilizada es esta:
Fuente: https://www.strongerbyscience.com/autoregulation/
Lo bueno de esta forma de autorregulación es que permite individualizar una rutina dependiendo del nivel de estrés que queramos conseguir con esta. Además, este tiene una alta correlación con otro método mucho más complejo como la velocidad de la repetición ya que se ha demostrado que a mayor RPE menor es la velocidad del movimiento.
Existen otras formas de autorregulación como es una progresión semanal de peso fijada (subir ‘X’ kg cada semana), autorregulación progresiva según repeticiones obtenidas… pero ya hablaremos de sus ventajas e inconvenientes en el próximo artículo.
Conclusión
La autorregulación es un método de individualización que tiene en cuenta nuestras condiciones diarias y adecua el peso a mover según estas y no es entrenar según nos sintamos. Una de las formas más populares de autorregulación actuales es la escala RPE pero existen otros métodos como veremos en futuros artículos.
Hasta aquí el artículo de hoy. Espero que os hay gustado y os sea de ayuda. Si tenéis cualquier duda, dejadla en los comentarios y os responderé encantado. ¡Un abrazo!
Referencias:
- https://www.strongerbyscience.com/autoregulation/
- https://www.strongerbyscience.com/weekly-load-progression/